domingo, 12 de julio de 2015

El último verano

     Pero los finales no se pueden prever, simplemente suceden - Javier Krahe

     En mitad de este infierno de los 40º en el que se ha convertido España y a punto de tomarme mes y medio de vacaciones como mediocre bloguero, una pregunta me ha machacado estos días, ¿será este el último verano de Rajoy y su banda de malhechores...? Y yo mismo, muy eufórico, me respondo: ¡seguro! Semejante idiota no merece seguir al frente de este país. La estupidez demostrada en sus discursos del bobo, durante la convención de la secta, me dan la razón en lo de la falta de méritos de Rajoy, pero no me garantizan que su discurso del miedo, sus falsedades sobre el crecimiento o el veneno vertido por él y sus compinches contra la izquierda no calen en otros 10 millones de paletos, como pasó en 2011. A pesar de esto, prefiero seguir pensando que es el último verano, si hemos echado a la de la PPeineta... ¿Por qué no correrá la misma suerte el bobo?
 
 
     Si todo va bien, será también el último verano de tantas cosas... El último verano de la LOMCE, la Ley mordaza o la cadena perpetua encubierta. Será la última vez que a Mariano le pagamos las vacaciones en alguna propiedad de Patrimonio Nacional o la última vez que ViceSoraya nos promete una engañosa bajada de la tarifa eléctrica. En esta línea, será el último verano en el que el oPPusiano Fernández Díaz nos atemorice con alertas terroristas o maltrate a inmigrantes aterrorizados. También será la última vez que esa vaga llamada Báñez nos mienta hablando de empleo de calidad, cuando todos sabemos que se están contratando esclavos y la última vez que estas falsedades sean apoyadas por De Guindos y su estúpido discurso de crecimiento record, mientras el país se sigue empobreciendo. Por suerte será el primer y último verano en el que ese trePPa llamado Pablo Casado nos cuente milongas como esa de la "inusitada ola de robos y violencia en Grecia" y también la primera y la última vez que Montoro nos cuela una electoralista bajada de impuestos que a mí me supondrá 20 € al año, a mi jefe 40 €, al jefe de mi jefe 80 € y así hasta llegar a alguien que cobre 1 millón de €, al que le supondrá 3000 € anuales. Sin duda será el último verano de amenazas a los medios y periodistas críticos y por descontado, el último verano de secuestro para la tele pública y además, si ganan los que yo quiero, puede ser el último verano de la Ley electoral, del Senado y de las Diputaciones. Por supuesto será el último verano de asesores enchufados, de sobre-sueldos oscuros y ostentosos gastos innecesarios...
 
     Así podría seguir hasta septiembre, pero entonces no descansaría y el PP no merece tanto. Sí que quiero remarcar que si los españoles echamos a los PPajarracos, será el último verano de este blog que tanto me ha ayudado a desahogarme.
 
     Por cierto, que tal como va esa extorsión disfrazada de negociación llevada a cabo por los colegas de Rajoy en la UE CONTRA Grecia, parece que también será el último verano del Euro. Como dijo el gran Iñaki Gabilondo, las élites no han podido soportar que la "chusma" esté llegando al poder. ¡¡Feliz verano si el PP os deja!!

domingo, 5 de julio de 2015

Un gobierno del pueblo

     Los que comen bien piensan que se gasta demasiado en política social - Pepe Mujica

     Acostumbrados como estamos desde que estalló la crisis a que nuestros gobiernos en Italia, Portugal o nuestra denostada España, nos vendan a los invisibles dictadores del neo liberalismo, no tengo por menos que mirar con cierta envidia a los griegos, que tras varios años en manos de los de siempre, en enero se arriesgaron a cambiar su destino y parece que no se equivocaron. En esas elecciones eligieron a la tan temida por los líderes europeos Syriza, que prometió devolver el poder al pueblo. Hoy los griegos van a decidir si quieren aceptar las políticas que han empobrecido a los pueblos de Europa o, por el contrario, prefieren negociar un cambio de esas políticas para conseguir una Europa más justa para todos. Esto es poner un poquito de pimienta a este aburrido continente.
 
 
     Los verdugos de Grecia, Draghi, Merkel, Dijsselbloem o Lagarde, tiemblan solo de pensar que hoy en Grecia gana el NO. Se enfrentarían a lo desconocido si como han dicho durante la campaña, los griegos salen de la zona euro. Este sería el peor escenario, pues pondría de manifiesto el fracaso de la UE y de las políticas de austeridad que tanto sufrimiento han traído a todos los países de la UE, máxime cuando los responsables del problema griego están muy cerca de esa troika que hasta ahora todos temíamos, ¿verdad señor Draghi?
    
     Si a pesar de ganar el NO, se sigue negociando con el gobierno griego y finalmente se cede como ya insinúa Lagarde, sería para todos lo mejor que podría pasar, pero claro, para la tirana de Berlín y para sus esbirros Rajoy o Pasos Coelho, esta opción es inviable, dado que facilitaría la llegada al poder de los llamados despectivamente populismos, terribles para los traidores de los gobiernos europeos y sus intereses económicos, pero al menos una válvula de escape para los pueblos. Como veréis no contemplo la victoria del SI.
 
     Con todo lo visto y oído esta semana, los griegos ya han ganado. Han ganado Democracia, a pesar de que a los dirigentes de la UE esto no les guste. Para Rajoy el referéndum es ridículo y espera que acabe con Tsipras para poder negociar con otro gobierno, por supuesto de derechas como él. He aquí la finalidad de tanto PPostureo, acabar con Tsipras y su Syriza, legítimamente elegidos, pero muy lejos de los estándares admitidos por las élites europeas. Para desgracia de estas élites, parece que el NO se abre paso en el escrutinio. Efjaristó...