Muchos han sido los casos de corrupción que han saltado a las portadas en los últimos años, pero sin duda uno de los más mediáticos ha sido el caso Noos dado que entre los acusados se encuentra la mismísima Infanta Cristina, cuyo marido, Iñaki Urdangarín parece ser el cabecilla principal de la trama. Tras seis años de investigación, el pasado lunes se inició el esperado juicio. En esta primera sesión solo se trataron las cuestiones preliminares. Lectura de acusaciones y peticiones de penas, defensores de todos los acusados esgrimiendo argumentos en pro de sus defendidos y, teniendo en cuenta el nivel de algunos acusados, mucha expectación. Como es normal, la defensa de la borbona, intentó eximir a su clienta y para ello solicitó que se le aplicara la llamada doctrina Botín. Ninguna sorpresa con la intervención del fiscal Horrach, quien de nuevo en vez hacer su trabajo y acusar, se dedicó a defender a Su Alteza con la sumisa colaboración de la Agencia Tributaria, que emitió para la ocasión un nuevo informe para exculpar a Cristina de su fraude fiscal. Fue la intervención de la abogada del estado M. Dolores Ripoll, la que una semana después nos sigue sorprendiendo. Ni papá Rey hubiera defendido mejor a su díscola vástaga.
La señora Ripoll, quien debería defender nuestros intereses frente a una presunta delincuente, se dedicó a defender a la hermana del Rey desde el principio de su intervención y en el clímax de su perorata, no dudó en tirar por tierra eso de que "Hacienda somos todos". Supongo que desde el lunes 11 de enero de 2016, cualquier ciudadano en dificultades podrá ampararse en los argumentos de la Ripoll para eludir sus obligaciones con el fisco o ¿quizás no...? Seguro que no. Cristina pertenece a una familia cuyo patriarca y hermano son Reyes y parece que en el gobierno del inútil han decidido extender la protección de la corona a todos los miembros del clan, roben o no. Los PPajarracos, con la absurda actuación de la fiscalía y la abogacía del estado, han arrodillado al país ante los borbones. Montoro, Rajoy y demás gentuza genovesa, son fieles cortesanos y si hay que mirar hacia otro lado para mantener el buen nombre del Rey, se mira.
Una vez más Rajoy, en su infinita estupidez, consigue lo contrario de lo que pretende con sus PPatosas acciones de gobierno. En Cataluña, Rajoy es quien más independentistas crea y en toda España, el bobo, es el mejor aliado para que llegue la Tercera República.
Una vez más Rajoy, en su infinita estupidez, consigue lo contrario de lo que pretende con sus PPatosas acciones de gobierno. En Cataluña, Rajoy es quien más independentistas crea y en toda España, el bobo, es el mejor aliado para que llegue la Tercera República.
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