Del dedazo al recortazo: Rajoy el PPresidente que quizá no debió ser

     A pesar de su fulgurante ascenso en el PP nadie hubiera apostado nunca, allá por 1996, que el más insulso de los pajarracos llegara a ser algún día candidato de la secta de la gaviota y a presidir el gobierno de España. Aún habiendo ocupado varios ministerios, tras su gestión como ministro de la presidencia de la crisis del Prestige en 2002, la posibilidad de llegar a número uno en Génova se disolvía como según él pasaba con los hilitos del petrolero hundido (http://www.cadenaser.com/espana/audios/rajoy-prestige-salen-pequenos-hilitos-2002/csrcsrpor/20030830csrcsrnac_14/Aes/).

     Como los designios del innombrable, deidad de Génova, son inescrutables, designó a Rajoy como sucesor y candidato ante la sorpresa de todos. Es de suponer que las razones ocultas de este nombramiento, tienen más que ver con el carácter dócil y pusilánime de Rajoy que con sus dotes de mando. Y así, de esta forma, el del bigotito podía seguir gobernando en la sombra.

     Los problemas vinieron cuando el bobo gallego perdió las elecciones de 2004, más que por sus propios errores, por los ajenos. Es verdad que se negó a debatir en campaña. Es verdad que sólo contaba con la coyuntura económica como aval. Pero el error de bulto vino con la gestión que hicieron de los atentados del 11-M los fascistas del gobierno de Aznar (¡uy, lo he nombrado!) para ocultar la relación de la masacre con la aventura bélica del PP en Iraq. Durante esta primera legislatura de ZP, los Acebes, Zaplanas y demás ultras peperos, con Rajoy a la cabeza se alinearon para atacar al gobierno socialista. Todo valía: terrorismo, política exterior, religión...Fue en este periodo cuando se oyó por boca del bobo aquella acusación sin precedentes: "...están traicionando a los muertos", cuando el gobierno abrió la negociación con ETA.

     Sin pena ni gloria llegó el Partido Patraña a las elecciones de 2008, acusando a Zapatero de mentir, para variar. En este caso por la crisis, que ya asomaba y a la que ZP llamaba desaceleración. En esta campaña sí hubo debate, dos nada menos y nadie sabe como al final de uno de ellos, el pájaro bobo expresó el deseo de ver como una niña tenía un futuro feliz y no sé cuantas gilipolleces más. Desde entonces se empezó a hablar de la niña de Rajoy como un gran error. También fue en aquella campaña cuando tras beberse varios vinos por el centro de Ciudad Real, en el mitin posterior nos dejaba una frase que le perseguirá siempre, "¡viva el vino!", sensiblemente beodo y haciendo un ridículo espantoso.

     Pero llegaron las elecciones y volvió a perder y el ruido de sables sonaba con estruendo entre Aguirre, Gallardón y el ex ministro Costa, arengados por diferentes secciones del partido. Rajoy, a punto de dimitir, de repente decidió seguir adelante limpiando personajes que le lastraban tras recibir el apoyo interesado de Camps, que le montó un congreso en Valencia con el objetivo de encumbrar al bobo. Esta última legislatura en la oposición fue la de la crisis. Y manejado cual marioneta por Cospedales, Sorayas y Pons, Rajoy, con el apoyo de su secta, se encargó de zancadillear leyes y medidas de urgencia que ZP adoptaba para salir de la crisis. El resto consistió en dejarse llevar con comparecencias sin preguntas para no meter la pata y una campaña en la que todo fueron frases vacías y mentiras, que llevaron a los pajarracos a Moncloa para nuestra desgracia. El final de la historia ya lo conocemos: recortes, subida de impuestos, reformazo laboral...Pero esta semana, tras anunciar un nuevo recorte de 10.000 millones en sanidad y educación en una nota de prensa, la subida de la prima de riesgo y el hundimiento de la bolsa, vimos algo que no podremos olvidar. Rajoy, ante las preguntas de los periodistas pidiendo una explicación, se paró, puso cara de jueves y salió huyendo cual rata asustada por una puerta trasera del Senado.

     Y tras esta breve historia sobre un necio que llegó a presidente, se me ocurren varias preguntas:

- Comenzando por el final, ¿quién nos gobierna?. Dada la incapacidad del bobo para explicar, improvisar o simplemente defender sus medidas sin necesidad de estar arropado por los suyos, ¿quién está moviendo los hilos en Moncloa? ¿tienen algo que ofrecer para superar la actual situación? Hoy mismo, Floriano, pajarraco de organización de la secta, convocaba una rueda de prensa sin aportar propuestas ni soluciones, con el único fin de insultar a los socialistas para tapar sus vergüenzas.

- Teniendo en cuenta que este gobierno se quema a la velocidad de una falla y cómo la arpía Mari Cospi está colocando a los suyos para morder la yugular de Rajoy en cuanto tenga ocasión, ¿serán verdad las informaciones que ya hablan de sustituir a Rajoy por otra persona del PP? Y sobre todo, ¿sería legítimo?

- Las declaraciones de Aguirre queriendo devolver competencias, ¿es una nueva puñalada de la lideresa a su presidente? Hay que recordar que fue Rajoy como ministro de educación quien dio las competencias a las autonomías contradiciendo a su predecesora en el cargo Esperanziña.

- Ante la nueva crisis de deuda, ¿qué confianza puede ofrecer un presidente que huye en el senado, titubea ante la prensa en Varsovia y sólo se reúne con las autonomías donde gobierna para no tener oposición?

     ¡Qué Cristine Lagarde y su FMI nos pillen confesados!

LOS ERES DE LA NUEVA ERA

     El grupo Uribe, compuesto por la distribuidora Uribe y los supermercados Olé, presenta un ERE extintivo para 159 de sus 292 trabajadores en las provincias de Almería, Granada y Murcia. La empresa, lejos de tener pérdidas, alega causas económicas, en concreto disminución en sus ventas por la competencia en el sector y la proliferación de marcas blancas. Aplicando lo que marca el reformazo pepero pagará 20 días por año a los despedidos, cambiando de centro de trabajo a un buen número de los empleados restantes.